Las pobrezas

 


Tal vez sea la edad ,la madurez, el resultado de lo que estamos viviendo con la pandemia o esa voluntad de luchar por el lado más humano y justo de la vida que me hace cada vez darme más cuenta que este mundo no va bien. Todo ello me dice que ninguna batalla se pierde mientras en el corazón se tenga un tanto de compasión y en la cabeza sentido común.
No me parece justo que tengamos tanto, que derrochemos sin tener el menor de los remordimientos. Y si el argumento que calma nuestra conciencia es que eso siempre fue así, eso ya no me sirve.

Me pregunto: ¿Qué puedo hacer yo, minúsculo punto insignificante, en ese océano de humanos? Tal vez por primera vez me doy cuenta del tamaño descomunal de nuestro egoísmo y de la pobreza de nuestras almas. Esta pobreza es la peor ,la más dañina ...
Pero también me he dado cuenta que vivimos durmiendo ,ajenos a la realidad entre sueños de riqueza abundancia que no sabemos disfrutar pero sobretodo por desgracia que no sabemos ni agradecer. Somos pobres hasta para no dar ni las gracias.
Nos hace falta un despertar para realizar que somos inmensamente afortunados y que nuestra miseria espiritual no puede seguir. Despertarnos y darnos cuenta que tenemos hermanos en este mundo que no tienen nada mientras nosotros tenemos demasiado ...

Comentarios