Estar bien y feliz es cuestión de elección y no de suerte o mera casualidad.
Es estar cerca de las personas que amamos, que nos hacen bien y que nos quieren bien.
Es saber evitar todo aquello que nos molesta o hace daño, no dudando en usar el sentido común, la madurez obtenida con experiencias pasadas o incluso nuestra sensibilidad para ello. Es distanciarse de la falsedad, la envidia y las mentiras.
Evitar sentimientos corrosivos como el rencor, la ira, y las penas que nos quitan noches de sueño y en nada afectan a las personas responsables de causarlos.
Es valorar las palabras verdaderas y los sentimientos sinceros que a nosotros nos están destinando.
Es saber ignorar, de forma más fina y elegante posible, aquellos que dicen las cosas para dañar y cuyas palabras y carácter nunca valieron una milésima del tiempo que perdimos al escucharlas
Es construir un refugio de paz amor y ternura , nuestro mundo ,pero también donde todos los que quieran y amen puedan venir
Es intentar ser fuente de inspiración ,manantial de esperanza y gratitud
Es poner color y luz a nuestro alrededor pero sobre todo en nuestro interior
Es dejar fluir y vivir tan intensamente como se pueda el instante presente disfrutando y saboreando cada minuto de vida
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