La estrella de mi camino








La vida te ofrece en muchas ocasiones sorpresas que reajustan tu vida.
Un noche asomaba a mi ventana  una estrella me hablo. Al principio creí que soñaba pero por muy desconcertante que pareciera, así era. Hay tantas cosas desconcertantes en la vida que pensé: ¿Por qué no escucharla?.
“¿No sabes quien soy, verdad?”
“No, no lo sé” respondí
“Soy tu estrella, la que llevas esperando toda tu vida. He venido para iluminar tu camino.”
Por muy asombroso que parezca, ella tenía razón. Desde aquel día la estrella iluminó mi camino y todo cambio. Caminé descubriendo nuevos lugares, conociendo personas que me enseñaban lo preciosa que puede llegar a ser la vida. Mi estrella me enseño a confiar de nuevo, a vivir otra vez, todos los sombríos rincones desaparecieron y mi camino se lleno de alegría, las heridas de mis caídas sanaron y reconstruí una nueva vida sobre mis ruinas. Todo tenía sentido ahora y me pregunté como había podido vivir tanto tiempo en la tristeza y la oscuridad.
Pero un día mi estrella me dijo: “Me tengo que marchar”
“¿Marcharte, ahora?”
“Si, tengo que seguir iluminando más caminos y guiar más vidas,  esta es mi misión”
“Pero si te vas, me perderé”
“Yo me voy pero mi luz se queda. Viajaré, me alejaré pero siempre te guiaré y te seguiré, estaré siempre contigo”
“¿Cómo?” Contesté derrotada por la pena y la angustia.
“Me quedo aquí” dijo señalando mi corazón.
Y se fue sin más. Pero tenías razón, desde tu lejanía y la cercanía de tu cariño y ternura sigues guiándome y en mis oraciones doy gracias por haberte conocido, estrella mía, diste vida de nuevo a cada latido de mi corazón, despertaste mi alma con tu luz. Hay tanto por hacer, tanto por descubrir, tanto por amar y sentir, Todos los días rezo para que tu luz siga brillando durante millones de años  iluminando vidas y mi corazón.

Comentarios